PARRA en la Colección Manuela Magallanes

Carlos Antonio Parra Sánchez, conocido como «PARRA», es un reconocido artista cubano cuyo legado nos permite hablar de él en presente.

Nació en Holguín pero fue adoptado profesionalmente por Santiago de Cuba, ciudad donde desarrolló una destacada carrera como artista, docente y director en las principales escuelas de arte de ambas ciudades.

Es importante resaltar que Parra vivió y trabajó durante muchos años en República Dominicana, dejando una huella significativa.

Sus obras se encuentran en importantes colecciones privadas e instituciones públicas de este país.

En República Dominicana, la presencia de la obra de Parra la podemos apreciar en edificios públicos y parques.

La obra de Parra se ha extendido por todo el mundo y hoy en día podemos encontrarla en colecciones de varios países de Europa y Latinoamérica.

Parra se graduó en la Escuela de Artes Plásticas de Holguín y en la Escuela Nacional de Arte Cubanacán en 1971.

Además, realizó estudios superiores en Historia Universal y diferentes posgrados en Escultura Monumental y Ambiental, Cultos Sincréticos y Talla en Madera.

Ha recibido numerosos premios y reconocimientos tanto dentro como fuera del país, incluyendo el Premio de Escultura del Salón 30 de Noviembre y el Salón de Profesores de Holguín, así como una Mención en el Salón de la Ciudad de la Galería Oriente.

Durante veinte años, ejerció como profesor en el sistema de enseñanza artística, tanto en Holguín como en Santiago de Cuba, ocupando cargos de director y subdirector en diferentes etapas.

Su obra invita a la reflexión sobre el mundo actual, explorando la relación entre el espacio del ser y del estar, así como el valor real de la palabra.

Utiliza una multiplicidad de texturas y composiciones cargadas de simbolismo para expresar esta intención introspectiva.

A través de imágenes oníricas e intimistas, Parra explora la desfiguración de rostros y las diversas formas de ver la vida del artista.

Sus obras evocan sueños e inquietudes, al mismo tiempo que reflejan situaciones cotidianas del individuo común.

Parra, destacado escultor nacido en Holguín pero adoptado por Santiago de Cuba, dejó una profunda y destacada huella en el arte, especialmente en la escultura de Cuba y República Dominicana.

Residió y trabajó durante muchos años en República Dominicana, como mencionamos anteriormente.

En su última etapa de trabajo se dedicó a la pintura, expresión de su yo creativo.

Parra falleció a los 71 años -hecho que lamentamos profundamente- en Santiago de Cuba, dejando una trayectoria en el mundo del arte caribeño a través de sus obras y la docencia.